Retinopatía diabética
Se estima que la retinopatía diabética afecta al 40-50% de los diabéticos. Es una patología que puede producir graves problemas oculares, pero diagnosticada y tratada a tiempo se puede evitar la afectación visual. En fases iniciales no suele provocar pérdidas de visión, pero si produce cambios en la estructura de la retina.
¿POR QUÉ EMPEORA LA VISIÓN?
La retina es la parte más interna del ojo. Su misión es convertir la luz que entra en el ojo en impulsos nerviosos que se trasmiten al cerebro produciendo la visión.
En personas diabéticas, el exceso de azúcar en la sangre puede hacer que los capilares sanguíneos de la retina viertan parte de su sangre fuera de ellos. Además, suelen formarse otros nuevos capilares aun más débiles que los primeros, que podrían dar lugar a pequeñas hemorragias etinianas, generando así una inflamación de la retina.
En ocasiones, la zona que se inflama es la mácula, que es la parte de la retina que permite tareas como la lectura o enhebrar una aguja.
SÍNTOMAS
Si se genera un edema macular, se puede nublar la visión, dificultando tareas como la lectura, la conducción, etc. La visión también puede fluctuar a lo largo de un mismo día.
Si se producen hemorragias grandes, se pueden producir pérdidas severas de visión.
En este caso se debe recibir atención médica inmediata.
DIAGNÓSTICO
Realizar un examen visual que incluya: toma de agudeza visual, examen de fondo de ojo y medida de presión ocular.
Todas las personas a partir de 50 años deberían hacerse una revisión ocular completa una vez al año para comprobar el
estado de salud de sus ojos. Las personas con antecedentes familiares de diabetes u otras enfermedades deberían hacerse revisiones más frecuentes.
MANEJO CLÍNICO USUAL
Las revisiones son fundamentales para poder diagnosticar y tratar de forma temprana, y así intentar detener el avance de las lesiones ocasionadas por la retinopatía con el fin de mejorar la visión.
La mayor parte de las veces se trata con láser, aunque dependiendo de qué parte del ojo esté afectada y de la severidad de la retinopatía, se pueden realizar otros tratamientos como: vitrectomía, crioterapia, o si existiese desprendimiento de retina, cirugía o unión mediante láser.
La actitud del paciente, e cumplimiento de su medicación y seguir la dieta apropiada, resultan esenciales. Debe mantener niveles bajos de azúcar.
Información facilitada por su Óptico - Optometrista